La falta de calado impide a barcos deportivos salir a navegar en Foz (Lugo)

Tras invertirse 500.000 euros en dragados en el entorno de la zona portuaria de Foz en los últimops cinco años, con la última actuación, que concluyó hace varias semanas, parece que se hayan corregido los problemas que afectan principalmente a los amantes de la náutica-recreativa. Si a finales de verano fueron los socorristas de Barreiros los que denunciaron que en bajamar, la falta de calado les impedía sacar sus zódiacs de Porto Chico, ahora son también socios y no socios del Club Náutico los que soportan este problema. El presidente de la entidad, Luis Fernández Rego, reconoce que en zonas de la dársena del muelle deportivo solo existe medio metro de calado, cuando lo mínimo deberían ser dos.

Además de ser un problema actual, esta situación lastra el desarrollo de la actividad náutica en un puerto con tirón: 120 personas están en lista de espera por una plaza de amarre.

Algunos usuarios van más allá y no entienden cómo Portos puede seguir cobrándoles las mismas tasas por un servicio que en Porto Chico, a diferencia de en otras instalaciones náuticas gallegas, sí disfrutan. ¿Y qué pasaría si dejaran de pagar? «Pois Portos pasaríache o cobro por vía executiva», responden.

El responsable del club indica a modo orientativo que la cantidad media que abona al ente autónomo el propietario de una embarcación ronda los 400 euros al año. En calidad de presidente del club -con unos 240 socios- reconoce el malestar que existe entre los amantes de la náutica y lamenta que tampoco se encuentre el apoyo público necesario para instalar otro pantalán en Porto Chico, para completar el servicio que también se presta en la dársena pesquera.

Desde Portos reconocen el problema de calado que existe en Porto Chico, pero explican que «forma parte das dinámicas marítimas e son mareas moi vivas». No contemplan ninguna solución inmediata, pero destacan las cuantiosas inversiones realizadas en Foz y los proyectos de relevancia en curso.